El precio de la gasolina no sube, yo siempre le pongo 20 €.


Parece un chiste, ¿verdad?. Pues no tiene nada de gracia. Los precios suben pero los indicadores de inflación se mantienen estables. Su sueldo que es revisado en base al IPC no sube, porque "los precios se mantienen estables". Usted va a Mercadona y ve que los precios se mantienen estables, pero cada vez la comida le dura menos en su despensa y para colmo, esta es de menor calidad. ¿Qué está pasando? Pero si la tele dice que no hay inflación. ¿Qué está sucediendo?


La inflación se ha constituido en uno de los fenómenos más difíciles de analizar pero no es más que la  resultante de la combinación de múltiples y complejos factores cuyo control se ha convertido en el más duro rompecabezas en el marco de las políticas macroeconómicas de los distintos países del mundo.

La inflación se presenta como la causa y, a la vez, como el efecto de la actual situación. Es la pescadilla que se muerde la cola.


Bourbon ha confesado que su whisky es más aguado, las hamburguesas en McDonals valen lo mismo pero ahora son más pequeñas. ¿No se da cuenta? ¿No es eso inflación? Si el productor gasta mas en materia prima pero no puede repercutirlo en el cliente para que no suban los precios, no le queda otra que poner menos cantidad, no es ciencia ficción, esto esta pasando ahora.


El dinero que se está poniendo en circulación está creando inflación. Los bancos centrales emiten papel en una guerra de divisas con notables consecuencias en los precios de la alimentación.

La ternera se combina con carne de caballo ante el elevado precio de la primera en las hamburguesas que usted consume. Eso es inflación. 

El Euribor, el Libor o la referencia hipotecaria que usted quiera poner como ejemplo ha bajado y usted cree que gasta menos en su cuota de hipoteca. Las grandes entidades financieras han manipulado estos indicadores: Adjunto el documento oficial aunque detallo una parte a modo de ejemplo:






Documento del FSA (La Autoridad de Servicios Financieros del Reino Unido )




Tenemos tipos bajos pero una inflación en el mercado que no compensa en absoluto ese efecto. Es un truco de magia perfecto.

Le he mostrado el conejo y la chistera. De usted depende ir a la gasolinera y pensar o no si ha subido el precio de la gasolina, porque como diría aquel señor: "El precio de la gasolina no sube, yo siempre le pongo 20 €".




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